miércoles, 11 de junio de 2008
martes, 10 de junio de 2008
sábado, 7 de junio de 2008
entrevista con Peter North
http://www.almamater.cu/2008/universidad/febrero/peter.html
Peter North es un diseñador austríaco invitado a La Habana a propósito de Formas 2007, un encuentro académico bienal e internacional que convoca desde el año 2001 el Instituto de Diseño (ISDi), de Cuba. Ante docentes y estudiantes, el profesor North —afincado en México—, habló de lo humano, lo divino y lo diabólico en el cambio de concepciones sobre la relación diseño-realidad.Profesor de la Escuela Gestaltde Diseño, en Veracruz, México, el Dr. North se insertó allí tras un largo recorrido, primero fue a trabajar a la Universidad de IIIinois, en Estados Unidos y luego estuvo en Colombia tres años. Entonces le propusieron formar parte de la Gestalt.«La teoría del diseño de la Escuela Gestalt de México aprecia mucho la mecánica humana, por ejemplo: halar, empujar, sostener y levantar; valora el constructivismo y la idea de atravesar, penetrar, etc. Y considera superfluo un manual con un montón de páginas paraentender un simple aparato que entre sus funciones debería tener la de ser un poco “más amable”». En su disertación, North había recalcado dos aspectos: la formación de diseñadores —y la educación en general— estaban en un urgente punto de cambio, y que el diseño hoy no podía ser sino «holístico». Luego, en un intercambio con Alma Mater, quiso ser más explícito ante un comentario que se desgajaba de puro evidente: si el pensamiento que prima hoy es que la universidad, como concepto global, responde a los requerimientos del empresariado, significa que zafarse de la tutela del pensamiento mercantil —de vender, ganar, vender más, ganar más— va a ser muy difícil.
El Dr. North sonrío pensativo negando con la cabeza: «ya sé que en muchos aspectos todavía estamos en un proceso de análisis muy “ciego”. Existen muchas herramientas y caminos científicos que no utilizamos, bien por pereza, o porque son extremadamente costosos o son privilegio de la industria militar, que llega a la exquisitez de diseñar un blindado pensando en todo, incluso en las comodidades del conductor, porque eso permitirá más eficiencia en la labor para la que fue destinado, es decir, arrasar, matar. Es terrible.«La base del cambio está en las escuelas, con los niños, e incluye la formación de diseñadores bajo el principio de que su misión no solamente es resolver problemas en la industria, sino también «educar» al usuario y decirle... este material, este otro y el de más allá, tiene ciclos de vida que van contra el equilibrio ecológico. Este que te propongo es dos veces más caro, pero a la larga tendrá menos costos sociales, y finalmente te permitirá con una inversión, reciclar los desechos… Todo esto le exige al diseñador una preparación muy amplia para convencer.«A mi modo de ver el cambio está también en la fórmula «diseño-biología-alta tecnología», pues esta última nos puede ayudar mucho. Hoy se hacen tres mil modelos de secadores de pelo en el mundo, basado en aire caliente por resistencia, que si no andas con cuidado te inflama el cuero cabelludo, además del gasto de energía eléctrica; pero sé que llegará el día en que sea normal un «secapelo» con un simple chip, más pequeño y poco consumidor de energía, que no traiga riesgo de quemadura o de accidentes domésticos».Pero en la ecuación planteada por el profesor no aparecían la filosofía o la ideología. ¿O no son necesarias?, le preguntamos: «Mercado y mundo empresarial están demasiado prostituidos —dijo— pero cuando se está filosóficamente preparado para educar socialmente, se consigue la base del pensamiento que evitará la catástrofe del planeta, empezando por comprender los costos sociales. De modo que es importante la casi propaganda indirecta del partido de los verdes, que favorece el diseño de productos bajo un pensamiento ecologista.«En Gestalt Veracruz estamos formando diseñadores preparados para la sustentabilidad. Aunque no descartamos la formación tradicional, damos contenido de biología, en tanto nos ofrece información sobre formas, estructuras y materiales». Sin embargo, en una etapa en que se ha llegado a niveles altos de estudios de las funciones y estructuras biológicas de los seres vivos para aplicarlas a la construcción de mecanismos artificiales, ciencia de la Biónica le llaman, pareciera demasiado pedir a un profesional. North acepta sin titubeos: «sin dudas, es muchísimo, pero es una realidad ineludible, porque en casi 80 años no ha habido todo el cambio necesario. La escuela Bauhaus con mucha fuerza en el diseño alemán y mundial, no tuvo conciencia ecológica —al menos no del impacto negativo en la ecología—, porque venían de otra visión propia casi del siglo XIX, y esa falta la heredamos muchos. En el siglo XXI no podemos pensar igual, en un momento en que la falta de agua es ya un problema, el diseñador no puede, en un planeta dominado por la religión del consumismo, estar al margen del qué hacer con la basura, de lo que es al menos reciclable e incluso pensar en los materiales del embalaje. «Cada año se producen nuevos materiales y sus creadores los ponen en el mercado “a como sea”, luego empiezan una campaña fuerte con los diseñadores, incitándolos con vehemencia a usarlos. No muchos se imaginan la presión que los diseñadores sufren. También es verdad, por otra parte, que a unos cuantos solamente les interesa realizar un diseño vendible».
Contra la lógica del concepto de ganancias del capitalismo, el profesor North tiene una visión muy particular de promover la cultura ecológica, que recuerda la táctica de las artes marciales asiáticas: «aprovecha la fuerza del contrario a tu favor». Lo cuenta de un modo muy mexicano: «Hice un trabajo con pensamiento ecologista y sentido del reciclaje para una empresa , y al fijar el precio, el empresario con las manos en la cabeza gritó: ¡tanto! Bueno hagamos un contrato oficial, le respondí, enséñame cuáles son las cifras de ventas hoy y el próximo año cuando hagas tu inventario me das el 20% de las ganancias. Te darás cuenta entonces cuál fue mi contribución a tu empresa. Además estoy dando una solución a tono con “la moda”, que es hacer productos ecológicos».
A partir de 1992, la Escuela Gestalt de Diseño de Veracruz, es una institución de estudios superiores. Sus orígenes se remontan a 1987, fecha de su fundación en Xalapa, Veracruz, con una propuesta original en la enseñanza a nivel universitario en México. Según se presentan a sí mismos «dicho modelo educativo se basa en los estudios de la Psicología y un enfoque creativo», al estilo de la escuela alemana de Psicología Gestalt. La relación de conocimientos estéticos, técnicos, teóricos y humanos, permite a los docentes de la escuela enfocar la enseñanza del diseño de una forma global.
Ruidos y nueces en el camino del diseño
Conversación con Peter North
Por Jorge Sariol
Por Jorge Sariol
Fotos: Abel Ernesto
Peter North es un diseñador austríaco invitado a La Habana a propósito de Formas 2007, un encuentro académico bienal e internacional que convoca desde el año 2001 el Instituto de Diseño (ISDi), de Cuba. Ante docentes y estudiantes, el profesor North —afincado en México—, habló de lo humano, lo divino y lo diabólico en el cambio de concepciones sobre la relación diseño-realidad.Profesor de la Escuela Gestaltde Diseño, en Veracruz, México, el Dr. North se insertó allí tras un largo recorrido, primero fue a trabajar a la Universidad de IIIinois, en Estados Unidos y luego estuvo en Colombia tres años. Entonces le propusieron formar parte de la Gestalt.«La teoría del diseño de la Escuela Gestalt de México aprecia mucho la mecánica humana, por ejemplo: halar, empujar, sostener y levantar; valora el constructivismo y la idea de atravesar, penetrar, etc. Y considera superfluo un manual con un montón de páginas paraentender un simple aparato que entre sus funciones debería tener la de ser un poco “más amable”». En su disertación, North había recalcado dos aspectos: la formación de diseñadores —y la educación en general— estaban en un urgente punto de cambio, y que el diseño hoy no podía ser sino «holístico». Luego, en un intercambio con Alma Mater, quiso ser más explícito ante un comentario que se desgajaba de puro evidente: si el pensamiento que prima hoy es que la universidad, como concepto global, responde a los requerimientos del empresariado, significa que zafarse de la tutela del pensamiento mercantil —de vender, ganar, vender más, ganar más— va a ser muy difícil.
El Dr. North sonrío pensativo negando con la cabeza: «ya sé que en muchos aspectos todavía estamos en un proceso de análisis muy “ciego”. Existen muchas herramientas y caminos científicos que no utilizamos, bien por pereza, o porque son extremadamente costosos o son privilegio de la industria militar, que llega a la exquisitez de diseñar un blindado pensando en todo, incluso en las comodidades del conductor, porque eso permitirá más eficiencia en la labor para la que fue destinado, es decir, arrasar, matar. Es terrible.«La base del cambio está en las escuelas, con los niños, e incluye la formación de diseñadores bajo el principio de que su misión no solamente es resolver problemas en la industria, sino también «educar» al usuario y decirle... este material, este otro y el de más allá, tiene ciclos de vida que van contra el equilibrio ecológico. Este que te propongo es dos veces más caro, pero a la larga tendrá menos costos sociales, y finalmente te permitirá con una inversión, reciclar los desechos… Todo esto le exige al diseñador una preparación muy amplia para convencer.«A mi modo de ver el cambio está también en la fórmula «diseño-biología-alta tecnología», pues esta última nos puede ayudar mucho. Hoy se hacen tres mil modelos de secadores de pelo en el mundo, basado en aire caliente por resistencia, que si no andas con cuidado te inflama el cuero cabelludo, además del gasto de energía eléctrica; pero sé que llegará el día en que sea normal un «secapelo» con un simple chip, más pequeño y poco consumidor de energía, que no traiga riesgo de quemadura o de accidentes domésticos».Pero en la ecuación planteada por el profesor no aparecían la filosofía o la ideología. ¿O no son necesarias?, le preguntamos: «Mercado y mundo empresarial están demasiado prostituidos —dijo— pero cuando se está filosóficamente preparado para educar socialmente, se consigue la base del pensamiento que evitará la catástrofe del planeta, empezando por comprender los costos sociales. De modo que es importante la casi propaganda indirecta del partido de los verdes, que favorece el diseño de productos bajo un pensamiento ecologista.«En Gestalt Veracruz estamos formando diseñadores preparados para la sustentabilidad. Aunque no descartamos la formación tradicional, damos contenido de biología, en tanto nos ofrece información sobre formas, estructuras y materiales». Sin embargo, en una etapa en que se ha llegado a niveles altos de estudios de las funciones y estructuras biológicas de los seres vivos para aplicarlas a la construcción de mecanismos artificiales, ciencia de la Biónica le llaman, pareciera demasiado pedir a un profesional. North acepta sin titubeos: «sin dudas, es muchísimo, pero es una realidad ineludible, porque en casi 80 años no ha habido todo el cambio necesario. La escuela Bauhaus con mucha fuerza en el diseño alemán y mundial, no tuvo conciencia ecológica —al menos no del impacto negativo en la ecología—, porque venían de otra visión propia casi del siglo XIX, y esa falta la heredamos muchos. En el siglo XXI no podemos pensar igual, en un momento en que la falta de agua es ya un problema, el diseñador no puede, en un planeta dominado por la religión del consumismo, estar al margen del qué hacer con la basura, de lo que es al menos reciclable e incluso pensar en los materiales del embalaje. «Cada año se producen nuevos materiales y sus creadores los ponen en el mercado “a como sea”, luego empiezan una campaña fuerte con los diseñadores, incitándolos con vehemencia a usarlos. No muchos se imaginan la presión que los diseñadores sufren. También es verdad, por otra parte, que a unos cuantos solamente les interesa realizar un diseño vendible».
Contra la lógica del concepto de ganancias del capitalismo, el profesor North tiene una visión muy particular de promover la cultura ecológica, que recuerda la táctica de las artes marciales asiáticas: «aprovecha la fuerza del contrario a tu favor». Lo cuenta de un modo muy mexicano: «Hice un trabajo con pensamiento ecologista y sentido del reciclaje para una empresa , y al fijar el precio, el empresario con las manos en la cabeza gritó: ¡tanto! Bueno hagamos un contrato oficial, le respondí, enséñame cuáles son las cifras de ventas hoy y el próximo año cuando hagas tu inventario me das el 20% de las ganancias. Te darás cuenta entonces cuál fue mi contribución a tu empresa. Además estoy dando una solución a tono con “la moda”, que es hacer productos ecológicos».
Luego de descender del estrado donde impartió la conferencia, el académico volvió sobre sus pasos y dijo: «déjenme sembrar una semilla. Estamos a tiempo. Cambiemos».«Yo creo en lo que digo», aseguró al final del intercambio con Alma Mater, «pero es un punto difícil de argumentar. Cuando analizas el caso de la grandes corporaciones, como Coca-Cola, que en muchos lugares además del refresco produce íntegramente sus envases, las vallas de publicidad y los materiales de construcción para colocarlas, todo se vuelve ganancia, ganancia, ganancia. No importan los daños, sobre todo si es en un país subdesarrollado. Solo lo admiten cuando se produce un caos notorio y al perder en una reclamación tienen que pagar millones.«Crear conciencia es el punto de partida y comenzar por hacerla contra el consumismo es el primer paso. Y la educación tiene mucha fuerza.«A pesar de que el mundo está inundado de productos —sobre todo asiáticos— y que la industria mundial no está interesada en su responsabilidad social, tengo confianza. También la prensa tiene su parte en este asunto. Espero que no sea necesario que nos llegue el agua al cuello para encontrar una solución. «Ser pesimista impide ser creativo».
A partir de 1992, la Escuela Gestalt de Diseño de Veracruz, es una institución de estudios superiores. Sus orígenes se remontan a 1987, fecha de su fundación en Xalapa, Veracruz, con una propuesta original en la enseñanza a nivel universitario en México. Según se presentan a sí mismos «dicho modelo educativo se basa en los estudios de la Psicología y un enfoque creativo», al estilo de la escuela alemana de Psicología Gestalt. La relación de conocimientos estéticos, técnicos, teóricos y humanos, permite a los docentes de la escuela enfocar la enseñanza del diseño de una forma global.
miércoles, 4 de junio de 2008
Suscribirse a:
Entradas (Atom)